Tesla planea que sus coches se carguen por inducción, pero los cargadores serán caros
21/12/2023
En diferentes momentos durante los últimos años, fabricantes de prestigio como Audi, BMW o Volvo han anunciado que preparaban sistemas de carga inalámbrica estática para sus nuevos vehículos eléctricos, aunque la aplicación de esta tecnología, que facilitaría mucho las operaciones de llenado de las baterías, no acaba de materializarse. Algunas no hablan ahora del asunto, aunque probablemente prosigan sus desarrollos en secreto, mientras que otras reconocen que continúan con la investigación. Es el caso de Volvo, pues la marca nórdica inició en marzo del pasado año un proyecto de tres años en la ciudad sueca de Gotemburgo, donde tiene su sede central, con una flota de taxis XC40 Recharge, totalmente eléctricos, que recargan sin cable, con una potencia superior a 40 kW y en diferentes paradas repartidas por la urbe que cuentan con emisores de electricidad soterrados.
Y, en los últimos meses, parece que es Tesla la que más ronda esa idea, lo que se plasmó este verano en la adquisición, por una cantidad no comunicada, de la joven empresa alemana Wiferion, especializada en la recarga sin cable de todo tipo de vehículos eléctricos. Blanco y en botella. Quizá por eso sorprendió que pocos meses después, el pasado octubre, la compañía de Elon Musk vendiera Wiferion, aunque en la operación hay un pequeño matiz de importancia clave: Tesla se quedó con sus ingenieros. Si parece un pato, vuela como un pato y emite sonidos de pato, es un pato.
Días atrás, de hecho, el jefe de Diseño de Tesla, Franz von Holzhausen, confirmaba al mediático presentador y humorista Jay Leno que trabajan en una plataforma de carga inductiva para aplicar a sus vehículos eléctricos, aunque sin dar más detalles al respecto. En realidad, parece que Tesla investiga sobre esa tecnología, incluso, desde antes de comprar Wiferion el pasado verano, pues en la junta de accionistas de la compañía del pasado mes de marzo ya se pudo entrever una imagen en la que un Model S, su berlina ejecutiva, aparecía sobre lo que todos interpretaron entonces como un cargador inalámbrico estacionario doméstico. Es decir, carga sin cable en tu propio garaje.
Total o parcialmente empotrado
Y, aunque no hay más datos, esta confirmación oficial deja muy claro que ese es el siguiente objetivo de la marca de Musk para que sus coches eléctricos sean aún más fáciles de usar, aunque la instalación de uno de estos puntos de carga en nuestra casa podría suponer un coste más elevado que el de los actuales cargadores de poste o de pared, pues la plataforma inductiva, a falta de conocerse nuevos detalles, podría ir empotrada total o parcialmente en el suelo. A su vez, los coches necesitarían un receptor inductivo en los bajos de la carrocería, que también añadiría coste al vehículo. Pero son detalles sobre los que todavía no se sabe nada oficialmente.